Título: Una soledad demasiado ruidosa
Autor: Bohumil Hrabal
Año de publicación: 1976
Páginas: 160
Desde hace treinta y cinco años, Hanta trabaja en una trituradora de papel prensando libros y reproducciones de cuadros. En cada una de las balas de papel que prepara conviven libros, litografías, ratoncillos aprisionados y su propio esfuerzo, que se manifiesta en una relación absolutamente amorosa con los libros que destruye por oficio y salva por pasión.
Opinión
La atención del lector acompaña a Hanta, un hombre que lleva treinta y cinco años prensando papel y dando una última vida a los libros que ayuda a desaparecer; nuestro personaje principal es un apasionado de su trabajo, realmente siente que para ello nació, que eso es lo que debe hacer durante lo que le queda de vida, es su felicidad, el motivo por el cual vive y elige vivir.
Pero, más allá de lo superficial, hay varias teorías que se pueden aplicar a la interpretación de este texto tan interesante. El primer análisis, y a mi parecer uno de los más interesantes, es el que se basa en un conflicto del país de donde se dan los acontecimientos. En esta interpretación, la vida de Hanta se ubica en una línea de tiempo definida, nos podemos llegar a imaginar cómo fue su existencia y su entorno.
Nos podemos encontrar con que el trabajo que lleva a cabo Hanta es en realidad el suprimir conocimiento, el impedir que las personas pudiesen llegar a pensar y entender el mundo a través de los libros, los cuales son destruidos por prensas como la de Hanta para evitar posibles revueltas entre el pueblo. Hanta puede ser considerado en cierto sentido como un hombre arriesgado, un revolucionario, alguien que es capaz de imaginar algo más allá de su realidad y por ello decide salirse del régimen, así no fuese del todo consciente.

En conclusión es una lectura adictiva y digna de recordar. Pocos personajes se ven y lucen tanto como el de este libro; es un pensador, un sabio a pesar de sí mismo, a pesar de todo lo que ha tenido que vivir y sufrir; al final vuelve al lugar al que pertenece, entre los libros y con su prensa, sumido en una felicidad aún más grande que él. En definitiva es una historia a la que vale la pena darle vida y con la que se disfruta desde la primera frase, desde el primer instante en que Hanta abre su alma al lector.